El déficit en las provincias alcanzaría los 20 mil millones de pesos en 2009

El anuncio del Gobierno nacional de aumentar un 15 por ciento los sueldos de estatales dejó al descubierto la fragilidad presupuestaria de algunas provincias que no podrán hacer frente a tal erogación. El 2009, año electoral, dejaría un déficit de 20 mil millones de pesos en las cuentas provinciales.

Algunos ministros a las órdenes de gobernadores en problemas no descartaron la posibilidad de emitir cuasimonedas después de las elecciones.

La estimación de un rojo de 20 mil millones (según mediciones privadas) se compone tanto del déficit consolidado de las 24 jurisdicciones (que llegaría a los $8.500 millones) más las amortizaciones de la deuda publica.

Los estados más afectados son, hasta ahora, Córdoba, Río Negro y Jujuy, provincias donde las titulares del área de Hacienda admitieron que podrían emitir cuasimonedas tras las elecciones. A esos distritos se suman con rojos en sus cuentas Tierra del Fuego, Salta y Santa Fe; además de la provincia de Buenos Aires, cuyo déficit ya es crónico y representa las 3/4 partes del déficit total de las provincias.

Estos números no son novedad pero saltan a las tapas de los diarios (Clarín y Crítica los toman en su edición dominical) días después de que el Gobierno nacional acordara con los estatales una suba salarial del 15,5 por ciento. Buena parte de los gobernadores no saben ahora cómo hacer frente a tales aumentos puesto que, mientras en Nación los sueldos representan el 10 por ciento de las erogaciones presupuestarias, en el interior ese número salta a más del 50% (en promedio, ya que en algunos distritos es aún mucho mayor).

Cierto es que Nación decidió semanas atrás coparticipar el 30 por ciento de los ingresos por retenciones a la soja; sin embargo, al mismo tiempo compensó las remesas de dinero hacia el interior con una drástica baja en las transferencias discrecionales que hasta ahora venía haciendo Planificación.